Hace unas semanas, mi hijo de 9 años entró en la cocina gritando: “¡Mamá, mira! ¡Es Bombardiro Crocodilo, el enemigo de Tralalero Tralala!”. Pensé que estaba inventando cosas, hasta que me enseñó un vídeo en TikTok. Lo que vi fue un tiburón con zapatillas Nike corriendo por una playa rosa mientras una voz con acento italiano gritaba nombres imposibles. Desde entonces, no ha pasado un solo día sin que escuche frases como “Tung Tung Sahur” o “Cappuccino Assassino” en casa. ¿Qué está pasando?
El fenómeno BrainRot Italian: una locura viral con acento
El llamado BrainRot Italian es una tendencia que ha arrasado en redes sociales como TikTok e Instagram, especialmente entre niños y adolescentes. Se trata de vídeos cortos protagonizados por criaturas generadas con inteligencia artificial, con nombres italianizados, voces robóticas y una estética que parece sacada de un sueño psicodélico.
En España, esta moda ha explotado desde abril de 2025, con millones de visualizaciones y hasta campañas de marcas como KFC y Lidl que han creado menús y memes inspirados en estos personajes. Incluso hay juguetes, peluches y figuras coleccionables disponibles en Juguetilandia.
¿Por qué gusta tanto a los niños? Qué diferencias hay con otros productos virales.
Como madre, me he preguntado muchas veces qué tiene esto que tanto engancha. Y tras observar (y confieso, reírme un poco), he llegado a algunas conclusiones:
- Es impredecible y absurdo: Los vídeos no tienen lógica, y eso los hace irresistibles. Cada uno es una sorpresa.
- Estímulo constante: Música, colores chillones, efectos visuales… todo está diseñado para captar la atención.
- Participación activa: Los niños no solo consumen, también crean sus propios personajes y los comparten.
- Lenguaje universal: Aunque los nombres suenen italianos, no hay barreras idiomáticas. Todo se entiende por el contexto visual.
A diferencia de fenómenos anteriores como los Pop It, los Fidget Spinner o incluso Labubu (esos monstruitos peludos que también están de moda), el BrainRot Italian no es un juguete físico en su origen, sino un universo digital que luego se ha materializado en productos.
Además, mientras otros virales suelen tener una función clara (relajación, colección, juego), este se basa en el puro entretenimiento absurdo. Es más cercano al humor post-irónico que a una moda tradicional.
Productos similares que también están de moda
Si tu hija o hijo ya está metido en este mundo, aquí van algunas ideas que podrían gustarle:
- Labubu: Criaturas peludas con estética kawaii, muy populares en TikTok.
- Skifidol Brainrot Mix: Un juego de cartas coleccionables con estética similar, mezcla de humor absurdo y nostalgia.
No todo lo absurdo es malo
Como madre, no puedo evitar preocuparme por lo que consumen mis hijos. Pero también he aprendido que no todo lo absurdo es malo. El BrainRot Italian, con toda su locura, es una forma de expresión cultural de esta generación. Lo importante es acompañarlos, poner límites razonables y, por qué no, reírnos juntos de un tiburón con zapatillas que grita “Tralalero Tralala”.
Veo positivo:
- Creatividad sin límites: Estimula la imaginación y el juego simbólico.
- Accesible: No requiere comprar nada para disfrutarlo.
- Conexión social: Los niños lo usan para compartir, reír y crear juntos.
Veo menos positivo:
- Contenido repetitivo y caótico: Puede saturar y dificultar la concentración.
- Poca supervisión: Algunos vídeos pueden tener humor inapropiado.
- Dificultad para desconectar: El formato adictivo de TikTok hace que pasen horas viendo vídeos sin parar.
En resumen, si no puedes con el enemigo… ¡Aprende a pronunciar “Schimpanzini Bananini” con acento italiano!