La fiesta de Halloween tiene sus raíces en un antiguo festival celta de hace más de 3.000 años. Evidentemente los motivos y tradiciones de la festividad han cambiado mucho de como la disfrutamos hoy en día. El origen de esta festividad lo encontramos en Irlanda, donde este festival llamado Samhain, simbolizaba el “fin del verano”.

La fiesta de Halloween se celebra en muchos países del mundo con temáticas similares, pero con pequeños cambios adaptados a la cultura del país. La influencia del cine y la televisión también han contribuido en hacer esta fiesta más universal e incluir los elementos clásicos que todos conocemos, como las calabazas talladas. En 1978 John Carpenter estrenó la película Halloween, ambientada en la víspera de todos los santos y con grandes dosis de terror. En la década de los 80 aparecieron otras películas con la misma temática y algo en común, la fina línea que separa el mundo de los vivos del mundo de los muertos.

Disfraces, mascaras, cuchillos, fantasmas, sangre, calabazas y un montón de accesorios de Halloween fueron dando forma a la festividad de la que disfrutamos hoy en día.

¿Qué significa la famosa frase “Truco o Trato”?

Es una buena idea para incluir a los niños en una festividad cargada de simbolismo para los adultos, con actividades que no siempre estaban autorizadas para todos los públicos. Esta tradición infantil, importada de países anglosajones como Estados unidos o Canadá, es muy práctica para las familias. Ya que los niños disfrutan durante la tarde-noche recogiendo caramelos por las casas del vecindario. Y así los adultos y adolescentes, pueden disfrutar posteriormente de la noche.

En que consiste el Truco, si a la pregunta contestas truco, probablemente tendrás una noche movidita. Ya que estarás aceptando (dentro de las normas de la festividad) que los niños tengan carta blanca para realizar alguna travesura en tu casa. Y en estos casos, dependerá de la imaginación de los más pequeños.

Si contestas Trato, tendrás una noche más tranquila. Los niños se conformarán con unos dulces o caramelos y dejarán tu casa en paz, por esta noche. Así que, si te gusta tu jardín, la fachada de tu casa o simplemente, no quieres tener a unos niños haciendo ruido durante la noche, guarda siempre unos dulces para esta noche tan especial.